Categoría: Tradiciones

San Juan de Los Lagos, conocido por su profunda tradición religiosa, se prepara para recibir la Semana Santa con una serie de celebraciones y eventos especiales que atraen a peregrinos y visitantes de todo México.

La Semana Santa en San Juan de Los Lagos es una experiencia única que combina devoción, tradición y celebración. Durante este tiempo, las calles se llenan de fieles que vienen a rendir homenaje a la Virgen de San Juan, patrona de la ciudad, y a participar en las diversas actividades religiosas y culturales.

Una de las tradiciones más destacadas es la procesión del Viacrucis, que recorre las principales calles de la ciudad y culmina en la Basílica de Nuestra Señora de San Juan de los Lagos. Los fieles llevan cruces y ofrecen oraciones mientras recorren el camino de Jesús hacia la crucifixión, reviviendo así la pasión y muerte de Cristo.

Otro evento destacado es la representación de la Pasión de Cristo, que se lleva a cabo en diferentes escenarios al aire libre de la ciudad. Esta representación teatral, realizada por actores locales, recrea los últimos días de Jesús en la tierra y atrae a una gran audiencia que viene a presenciar este emocionante espectáculo.

Además de las actividades religiosas, la Semana Santa en San Juan de Los Lagos también ofrece una variedad de eventos culturales, como conciertos de música sacra, exposiciones de arte religioso y ferias gastronómicas donde se pueden degustar platillos tradicionales de la región.

En resumen, la Semana Santa en San Juan de Los Lagos es una celebración vibrante y conmovedora que combina la devoción religiosa con la rica cultura y tradiciones de la región. Si estás buscando una experiencia espiritual única, no te pierdas la oportunidad de vivir la Semana Santa en esta encantadora ciudad de Jalisco.

Este 2 de febrero se celebra el Día de la Candelaria, esta celebración tiene un significado especial en San Juan de Los Lagos, ya que se inició en 1888 a raíz de una iniciativa hecha por del Obispo de León, Guanajuato, que proponía hacer un cambio por el 8 de diciembre o de la Inmaculada Concepción de María; esto debido al irrespetuoso comportamiento religioso que estaba desvirtuándose entre los peregrinos. Así, poco a poco, los peregrinos de Guanajuato y luego de otras entidades, la fueron haciendo importante hasta convertirla en una de las mayores fiestas en San Juan de Los Lagos. 

En este día, los fieles llevan consigo velas para ser bendecidas durante la misa. La bendición de las velas es un símbolo de la luz que la Virgen María trae al mundo. Algunas personas también llevan consigo figuras del Niño Jesús, recordando la presentación de Jesús en el Templo, que es una parte importante de la celebración.

La jornada comienza con una misa especial en la Basílica de San Juan de Los Lagos. La comunidad se congrega para participar en la liturgia, que está dedicada a la Virgen de San Juan de los Lagos. Después de la misa, se lleva a cabo una procesión que recorre las calles de la ciudad, llevando la imagen de la Virgen.

Durante la procesión, es común ver la participación de grupos de danzantes conocidos como «Matachines«. Estos danzantes, ataviados con trajes coloridos y plumas, realizan bailes tradicionales en honor a la Virgen.

Además de las actividades religiosas, la celebración del Día de la Candelaria en San Juan de Los Lagos incluye elementos festivos y tradicionales. Puestos de comida, música y actividades culturales pueden formar parte de las festividades que se extienden a lo largo del día. 

Se estima actualmente una afluencia de poco más de un millón de visitantes en término de nueve días, entre las peregrinaciones que arriban, indudablemente sobresale la Caravana Nacional de la Fe, con romeros provenientes de ocho estados de la República Mexicana y que hace su entrada el día primero de Febrero. Algunos miles de estos romeros caminan hasta casi un mes antes de la fecha señalada. 

La celebración es una oportunidad de reunirnos en torno a nuestra fe y tradiciones. Muchas personas participan activamente en los eventos religiosos y sociales, creando un ambiente de comunidad y devoción.   

Agradecemos al Mtro. Investigador Silvano Ruezga Gutiérrez por su valiosa aportación sobre esta festividad.

Fray Miguel de Bolonia, también conocido como Fray Miguel de Bologna, fue un destacado fraile franciscano que dejó una profunda huella en la historia de San Juan de los Lagos, Jalisco, y en la devoción a la Virgen de San Juan.

Nacido en Flandes (hoy parte de Bélgica) en el siglo XVI, Fray Miguel era un hombre culto y políglota, dominando varias lenguas como el flamenco, latín, francés, español, náhuatl, otomí, cazcano y tecuexe. Gracias a su valioso conocimiento, Fray Miguel de Bolonia llegó a la Provincia de Avalos, España, donde fue encargado por el venerable fray Antonio de Segovia de llevar la palabra de Dios y fundar pueblos en la región cazcana, en lo que ahora es Jalisco, México.

Fundador de San Juan Bautista Mezquititlán

Fray Miguel de Bolonia es recordado por ser el fundador de San Juan Bautista Mezquititlán, una población que con el tiempo se convirtió en la actual ciudad de San Juan de los Lagos. En el año 1530, Fray Miguel trajo consigo la imagen de la Virgen de San Juan de los Lagos, que posteriormente se convertiría en una de las más veneradas en México.

Bajo su guía, se construyó una pequeña ermita para la veneración de la Virgen de San Juan, y desde entonces, la devoción hacia ella ha crecido de manera incesante, atrayendo a miles de peregrinos y fieles de todas partes.

El legado de Fray Miguel de Bolonia perdura en cada rincón de San Juan de los Lagos, donde su laboriosidad, sabiduría y dedicación han dejado un impacto significativo en la historia y la identidad de esta ciudad sagrada.

Hoy en día, la Virgen de San Juan de los Lagos sigue siendo una fuente de esperanza y milagros, y su santuario es un lugar de peregrinaje para aquellos que buscan consuelo, protección y bendiciones divinas. La figura de Fray Miguel de Bolonia es recordada con gratitud y veneración, pues fue él quien trajo esta imagen milagrosa y dejó un recuerdo permanente en el corazón de los sanjuanenses y de todos aquellos que la visitan.

San Juan de Los Lagos, ubicado en el hermoso estado de Jalisco, México, es un destino de peregrinación conocido por su fervor religioso y su vínculo especial con la Virgen de San Juan.

Entre las tradiciones más significativas de esta devoción se encuentra el ritual del cambio de manto y vestido de la Bendita Imagen de la Virgen, una práctica arraigada desde los primeros años de su adoración popular.

La historia se remonta a 1623, cuando la familia de cirqueros del Primer Milagro regaló a la Virgen de San Juan un hermoso vestido de raso de China azul para ser revestida. Desde entonces, este ritual se lleva a cabo en cuatro ocasiones durante el año en San Juan de Los Lagos: en enero, se realiza para celebrar la Fiesta de la Candelaria; en abril, en honor al mes de mayo; en julio, durante la quincena de agosto; y en noviembre, como parte del novenario del 8 de diciembre.

Antiguamente, la Virgen solo era cambiada una vez al año, con motivo de la Fiesta titular de Nuestra Madre Santísima el 8 de diciembre, en su Inmaculada Concepción. Sin embargo, a lo largo del tiempo, se incorporaron otras fechas significativas para mostrar devoción y agradecimiento a la Virgen de San Juan.

El ritual en sí es un momento de profunda emoción y conexión con la Virgen. Después de la Misa de 7:30 pm, un grupo de religiosas y mujeres se encargan de despojar prenda por prenda el ajuar de la Virgencita, mientras los donantes rezan el Santo Rosario. Posteriormente, se realiza una limpieza minuciosa de la bendita Imagen con algodoncitos y se bendice el nuevo manto y vestido.

Una vez bendecido el manto, la Sagrada Imagen es vestida nuevamente y se le colocan sus nuevas vestiduras. Finalmente, se lleva a cabo una bendición con la Virgen de San Juan y se regresa a su Trono, lista para recibir las oraciones y la veneración de los fieles.

San Juan de Los Lagos es un lugar de gran importancia espiritual, y el ritual del cambio de manto y vestido de la Virgen es una de las prácticas más queridas por los devotos. Si visitas San Juan de Los Lagos, no te pierdas la oportunidad de presenciar este momento maravilloso y ser parte de la devoción a la Virgen de San Juan.

En resumen, el ritual del cambio de manto y vestido de la Virgen en San Juan de Los Lagos es una tradición arraigada desde el año 1623. Este hermoso acto de devoción se realiza en varias ocasiones durante el año y es un testimonio del amor y la fe de los habitantes de San Juan de Los Lagos hacia la Virgen de San Juan. Si deseas sumergirte en la espiritualidad y la tradición de esta región de Jalisco, no puedes dejar de visitar San Juan de Los Lagos y presenciar este ritual tan significativo.